sábado, 10 de enero de 2015

Savarika(a)

Como mi primer propósito del año y como reto personal me marqué hacer un viaje sola. Viaje que tendrá lugar  inicio la semana que viene y que por cuestiones de trabajo no puedo alargar mas de dos semanas.

El destino elegido es Tailandia y sus playas. El porqué muy bien no lo se pero es simplemente una sensación "a veces" me guío por sensaciones...y la que recuerdo de cuando estuve allí fue... me siento como en casa. Poco después aprendí que yo soy mi casa y que haya donde estoy...me suelo sentir así y que es mas una especie de adaptación mental al entorno...en unos lugares es mas rápida en otros no llega nunca. Pero el potencial de "sentirse como en casa" se encuentra siempre ligado a un mismo concepto, yo.

La elección de mi destino me ha traído mas de un quebradero de cabeza. En primer lugar me confieso enamorada de este lugar desde el minuto uno que pise esa tierra, ya ni que decir...cuando la arena se entre coló por los dedillos de mis pies y cuando el agua cristalina baño mi cuerpo, ahí quede "envenenada" de por vida.

Pero porque Tailandia... escoge otro lugar mas cercano con playa también uno al que no hayas estado...bueno si podría...pero siempre he querido volver a Tailandia y está lo suficientemente lejos para sentir que estoy sola.
Es una necesidad. Necesidad que me empuja y a la vez me asusta. Necesidad de sentir que puedo hacerlo. Que puedo estar a miles de kilómetros de los míos y sentir que soy capaz de estar en cualquier parte del mundo sola. Algunas personas no necesitaran de estas experiencias para saber que son capaces, yo si.
Siempre rodeada de gente aunque me considere independiente. He viajado mucho pero ha llegado el momento que creo que a toda persona a quien  le guste viajar le  llega. El momento de hacerlo sola.

Necesito conocerme en esas circunstancias y entenderme a mi misma aceptarme tal y como soy  y no planeando ni decidiendo mi vida con nadie más que conmigo....Interactuando con gente ya se que me va bien...pero con la que voy a pasar el resto de mi vida es conmigo misma...y ahí a  veces soy demasiado dura...

Tengo miedos a miles de cosas relacionadas con lo que podría salir mal...pero una vez leí " el miedo no evita la muerte sino que frena la vida" y las ganas de volver a este lugar son mas poderosas. Las ganas de conocerme en el mas profundo de los sentidos y de vivir la experiencia de viajar sola pueden con esos miedos. que a pesar de que están ahí los he metido en un frasco cerrado al vacío y por supuesto metido en la mochila )porque creo que no hay tampoco que ser temeraria y los miedos deben estar presentes.para agudizar los sentidos y estar despierta. y si bien de vez en cuando  esos miedos  no golpean las paredes de cristal  de mi frasco y me hacen prestarles atención por un segundo...no dejo que salgan de él y se apoderen de esta bonita oportunidad que me brinda la vida.

Queda pues así abierto mi cuaderno de bitácoras para este viaje. Y Ojalá sea el primero de muchos este año!!


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Suena genial, ole tu!

escalada y vida dijo...

Me ha gustado!